La importancia de saber decir «NO»
Uno de los derechos más importantes que tiene como trabajador es el derecho a decir “no” cuando recibe una orden insegura. No se trata solo de un privilegio, sino de una responsabilidad y es crucial para su seguridad y la de todos los que lo rodean.
Imagínese que le piden que realice una tarea sin el equipo ni la capacitación adecuados o en condiciones peligrosas. Puede resultar tentador aceptarla para evitar una confrontación, cumplir con una fecha límite, ahorrar tiempo o simplemente porque no quiere decepcionar a su supervisor. Pero considere las posibles consecuencias: una lesión, un accidente grave o, peor aún, la muerte. Por más que le guste o le apasione su trabajo, ese riesgo no vale la pena. Decir “no” a una orden insegura no se trata de ser problemático, perezoso o de eludir responsabilidades. Se trata de defender su integridad y la de sus compañeros.
Por eso, si usted identifica un peligro o riesgo sin controlar adecuadamente, que eleva innecesariamente el nivel de riesgo de una tarea, detenga la actividad. Converse con sus compañeros y paren las actividades hasta que se haya controlado adecuadamente.
Pero la responsabilidad no termina con usted. Los supervisores y gerentes deben respetar y apoyar este derecho. Si un trabajador plantea una inquietud sobre seguridad, debe tomarse en serio y abordarse de inmediato. Se debe alentar la comunicación abierta sobre inquietudes de seguridad, no desalentarla. Por eso. si su superior inmediato ignora su derecho a decir no, eleve el asunto a la alta gerencia, o repórtelo al ente regulador.
Al final, se trata de crear una cultura donde la seguridad sea la máxima prioridad. Cuando ejerce su derecho a decir «no» a las órdenes inseguras, no solo se está protegiendo a sí mismo, sino que está contribuyendo a un lugar de trabajo más seguro y más fuerte para todos. Por lo tanto, recuerde: si algo no le parece correcto, dígalo. Su vida y la vida de los demás dependen de ello.