Conducir de noche
Conducir de noche puede ser especialmente desafiante debido a la reducción de la visibilidad y al aumento de la fatiga. Estos son algunos consejos para conducir de forma segura durante la noche:
Asegúrese de que su vehículo esté listo: revise los faros, las luces traseras, las señales de giro, las llantas y los niveles de fluidos de su vehículo. Realice una inspección minuciosa para asegurar las condiciones de operatividad. Mantenga el parabrisas y los espejos limpios para maximizar la visibilidad.
Reduzca su velocidad: Vaya más lento que la velocidad máxima o respete el limite de velocidad diferenciado para conducción nocturna en caso existiera.
Use sus faros: Recuerde encender sus luces cuando lo mande el reglamento o deje de haber luz diurna. Use las luces altas en caminos oscuros sin otros vehículos a la vista, pero cambie a luces bajas cuando cruce con otros vehículos.
Evite el deslumbramiento: evite mirar directamente a los faros de los vehículos que se aproximan y ajuste su espejo retrovisor para reducir el deslumbramiento de los faros detrás de usted.
Manténgase alerta: La fatiga de noche es un peligro cuando se opera cualquier maquinaria. Si se siente cansado, informe a su superior y tome un descanso en un punto seguro.
Aumente la distancia de seguimiento: aumente su distancia de seguimiento con él vehículo que tiene delante. Esto le permitirá mayor tiempo de reacción para frenar o girar.
Tenga cuidado con su entorno: Preste especial atención a su entorno, pues la noche puede ocultar situaciones peligrosas cercanas a la vía, como vehículos detenidos, peatones, animales, obstáculos, pista en mal estado, entre otras.
Esté preparado para emergencias: Tenga a la mano el equipamiento de la camioneta. Lleve siempre una linterna, baterías adicionales y una manta en su vehículo para casos de emergencia.
Al seguir estos consejos, puede ayudar a asegurarse de conducir de forma segura durante la noche y reducir la posibilidad de un accidente.